¡ALTO!
(¡Hammer time! No, no es cierto…)
Pero si… ¡ALTO!
Entraste a ventas, leíste este blog (¡Este post en especial!), googleaste a Kiyosaki, Cardone y Gitomer por las ultimas horas y decidiste que lo correcto es entrar a un curso de ventas para mejorar tus habilidades y venderle a todo lo que se te pare en frente.
Pero… ¿Es una buena idea entrar a un curso de ventas?
¡CLARO! Felicidades por la iniciativa, ya estas en el camino correcto para aprender más y verdaderamente ser un profesional de las ventas y no un amateur que de mal nombre a la industria por ser demasiado “energético” (por ponerlo de alguna manera). Sin embargo, hay ciertas cosas que debes saber antes de elegir un curso de ventas e invertir tu preciado dinero en el:
1) 90% de la gente asistirá a un curso y no aplicara nada de lo que aprende.
2) Esa persona podrías ser tu.
3) Tienes que hacer algo para evitar que eso te pase.
4) ¿Cierto?
Es triste pero cierto, 90% de las personas que asisten a cursos de ventas no aplican NADA de lo que aprenden en su trabajo diario. Si, salimos más motivados, conocimos gente (¡Si lo hiciste bien!) y tomamos notas a lo bestia – ¿Pero de verdad estas aplicando algo de lo que aprendiste?
Que la satisfacción sola de haber ido a un curso no te engañe… ¿De verdad mejoro tu proceso de ventas? ¿Qué aplicaste? ¿Qué cambio? Si ir al curso solo hizo adelgazar tu cartera y no al revés… ¡No sirvió de nada!
Incluso al leer este blog y ver los cientos de tips que publicamos en nuestro Facebook ¿Estas tomándote el tiempo de incorporarlos a tu presentación? ¿O solamente los lees y sientes que ya mejoraste sin hacer nada?
Vender es una actividad que te expone. Eres como un trapecista de Cirque du Soleil (O Circo Atayde Hermanos..) que intenta un nuevo brinco triple mortal por primera vez en frente de una carpa llena de gente. Tu salto triple es aquel nuevo cierre que aprendiste, tu carpa llena de gente es la pareja que tienes en frente, el dueño del negocio o la familia buscando un auto nuevo…
¡Y tienes que dar un excelente show para vender!
El objetivo de este post es el de darte la mentalidad y las herramientas necesarias para que toda la teoría que recibas la apliques sin dudarlo de una forma organizada que te permita mejorar, re-diseñar y personalizar tu presentación.
Recuerda que…
El conocimiento NO es poder, es poder en potencia.
El conocimiento más acción constante y disciplina… Eso SÍ es poder.
Ahora, revisemos la regla de oro que todos debemos de seguir a la hora de llevar una nueva herramienta de la teoría a la practica en nuestra presentación de ventas.
– REGLA DE ORO –
Se Minimalista (El que mucho abarca, poco aprieta).
Sí. Así de sencillo.
Pasaste 8 horas seguidas por 7 días en el curso y estas saturado de información y listo y motivado para venderle huevos a la gallina. Ya intentaste venderle un timeshare a la señora de los tamales, un multinivel a la de la tiendita y un seguro de gastos médicos mayores al de la gasolinera… ¡ALTOOOOOO!
Un paso a la vez, un paso a la vez. ¡Elige una sola cosa que aplicar! ¡Una!
Después de asistir a un curso, no importa su duración (desde 1 hora hasta 6 meses), debes de ser minimalista. De tus cientos de papiros con notas y apuntes elige solamente 1 técnica, la que más te emocione pero SOLO UNA. Una vez que sepas cual es debes enfocarte en practicar esa técnica repetidamente dentro de un periodo de tiempo definido (Repito: ¡SOLO UNA Superman!).
Ejemplo:
Utilizare 3 tie downs durante mis siguientes 7 presentaciones del mes. Los tie downs que utilizare serán: “¿Si ves el valor de nuestro producto en tu empresa verdad?”, “Dime si me equivoco pero creo que esta seria la mejor opción para ti, ¿correcto?” y “¿Hasta ahorita que les parece el producto?”.
Ahora si.. ¡STOP! ¡Hammer time! (No lo puedo evitar…) y ve y escribe un texto así, solo de prueba, pero exactamente igual.
El objetivo de ser minimalista es poder reducir el margen de error que tendrás al intentar cosas nuevas. Menos variables, menos errores, menos pánico al vender.
En el ejemplo, seria muy probable que se te olvidara decir alguno de los 3 tie downs o el orden de las palabras y que termines preguntando algo diferente o incluso contraproducente… Imagínate ahora, que pasaría si arriba de estar aplicando tres tie downs nuevos intentaras espejear el lenguaje corporal de tu cliente, hacer “alternative closing” por primera vez y luego aplicar un “playhouse” nuevo… Todo en una misma presentación.
Serias como trapecista del Circo Atayde Hermanos después de tres pomos de Tonayan; valiente pero bien pinche confundido y tus clientes se darían cuenta.
Entonces: Elige una sola técnica, define el periodo de prueba y exactamente las palabras y el momento en el que las dirás, escríbelos, e inténtalo hasta que te sientas cómodo, tengas éxito o la descartes totalmente.
Ahora que ya conoces la regla de oro para llevar algo de la teoría a la practica, aquí te dejo unos tips para forzarte a intentarlas. Con estos consejos lo que buscamos es crear algo que los Americanos llaman “accountability” y que solo encuentro traducir como “rendición de cuentas”, es decir, exponerte ante una o más personas con una idea y obligarte a cumplirla.
TIP #1: Haz de aplicar una técnica nueva un reto con un amigo.
Al hacerlo en conjunto tienes apoyo, compromiso y competencia. Busca a alguien que haya tomado el curso y pongan una fecha limite para ver a quien le va mejor aplicando la nueva técnica.
TIP #2: Escribe sobre tu experimento en Facebook y compártelo.
Comprométete con el mundo. Escribe un post explicando el reto y lo que harás, después informa a todos de tus resultados y tu experiencia. Aparte de ser una súper forma de comprometerte, te posicionaras como el experto en ventas de tu circulo en redes sociales.
TIP #3: Platica con tu jefe, supervisor o gerente y coméntale lo que quieres intentar.
¿Qué mayor compromiso que contárselo a tu jefe? ¡Involúcralo! Si es un buen jefe te apoyara y te dirá “Pero que no bajen tus números” jaja. ¿Qué mejor presión que eso para hacerlo funcionar?
TIP #4: Usa la ley de la aversión e involucra dinero a tu reto.
El ser humano tiene una tendencia a hacer mucho más por no perder que por ganar. Utiliza el miedo de perder $50 o $100 dólares para motivarte a hacer tu nueva técnica funcionar. Apuesta con un compañero que lograras X resultado con la nueva técnica en X periodo de tiempo. ¡Comprométete!
– CONCLUSIÓN –
Créeme… Si logras aplicar UNA SOLA cosa nueva de todo lo que aprendiste en el curso, ya saliste ganando. Es fácil absorber teoría como una esponja pero romper el miedo (y la rutina) de intentar cosas nuevas durante tu show, durante tu espectáculo y con una audiencia en vivo… Eso, es muy diferente.
Somos vendedores. Hacemos nuestra tarea y una vez que se prenden las luces dejamos el equipaje, seguimos una estructura y nos dedicamos a impresionar a nuestros clientes. Minimiza. Agrega nuevas técnicas una por una a tu inventario. Recuerda no estamos en una carrera de 400 metros, vender es una carrera de resistencia. Quien da todo en los primeros 15 minutos se quema, quien es constante y comprometido logra enormes ventas, enormes clientes y enormes comisiones.
Minimiza.
¡Ahora! Si conoces a alguien que vaya a tomar un curso, si manejas a un equipo de ventas y das entrenamiento constante o simplemente si eres el ser más cool del planeta dale Like, Share y demás a este artículo en Facebook o comenta aquí abajo. La vida te lo agradecerá con muchos hijos y suficientes ventas para mandarlos a todos a Harvard.
¡Éxito!
#TodosVenden