Todos hemos fracasado alguna vez en la vida, los estudios, el trabajo, el amor, proyectos, relaciones, etcétera.

Por esta razón he seleccionado los tres puntos que debes tomar en cuenta para que sepas cómo lidiar con el fracaso.

Literalmente “Fracaso” significa:  Resultado adverso en una cosa que se esperaba sucediese bien.

Tomando en cuenta esto, se confirma que todos hemos fracasado en algo, mínimo una vez al día, desde el café que salió mal, el vaso de agua que cayó en la computadora, hasta el dedito del pie que chocó contra el mueble, así es, “fracasaste” en llegar sano y salvo a tu habitación.

El punto de decirte que fracasas todo el tiempo, no es para hacerte sentir un perdedor,  es para que normalices la palabra; uno al pensar en fracasos piensa en una tragedia monumental que arrasa con nuestra felicidad, no en algo tan simple como que fracasaste en llegar de punto A al punto B, como cuando tropezaste  al caminar.

Fracasar es casi tan cotidiano como tomar agua.

Hay que dejar de ver el fracaso como una tortura y que se convierta en un aprendizaje constante; viéndolo de una manera más reflexiva, los fracasos son los peldaños de la escalera al éxito.  

 

¿Mis consejos para enfrentar el fracaso?

 

1.- Encuentra el fallo

Fracasamos tantas veces en un día, que nunca nos damos el tiempo de analizar qué ha pasado, si nos golpeamos al caminar casi nunca pensamos “oye debería caminar con más cuidado” o si lanzamos un producto online el cual no tuvo ventas, nos concentramos primero en el “esto fue un fracaso” y no en el “¿cómo podemos arreglarlo?.

Ya sabes que fracasas muchas veces más de lo que imaginas, ahora para saber evitar esos tropiezos, debes saber que algo está mal y debe arreglarse, encontrar el fallo en ti, en tu sistema, o en tu producto o servicio.

Desde luego el objetivo de esto, es evitar que el fracaso se repita para eliminar los constantes fracasos en cualquier cosa que realices, no hay que ser perfecto, más bien hay que ser observador, fijarse en los detalles que están haciéndote tambalear y equivocarte.

 

2.- Entiende que no eres el único

Si ya sabemos que el fracaso es más común que la lluvia, por consiguiente sabemos que todos fracasamos.

Uno podría pensar que saber que no eres “el único que fracasa” no sirve para nada, a final de cuentas, de qué sirve el ser parte de “una red cotidiana mundial de personas que no logran el éxito”, lo realmente importante de esto es que primero que nada no estás solo, y si no estás solo puedes aprender de quien ha fallado como tú, te aseguro que muchos de tus mentores saben lo que saben tras superar más de un fracaso.

Además de que puedes aprender de los fracasos de los demás y viceversa, siempre debes saber que sentirse parte de algo es alentador.

Deja de pensar que eres parte de un grupo internacional de perdedores de los cuales aprendes, si no que estas enlazado, gracias al fracaso, a un porcentaje de personas en el planeta, que no se van a a rendir hasta transformar sus errores en aciertos.

 

3.- Vuélvelo a intentar

Ya sabes en qué fallaste, cómo repararlo y qué puedes aprender de los fracasos de otras personas, bueno, después de haber divisado estos puntos, lo que sigue es volverlo a intentar.

Lo fantástico de fracasar es que es un tropiezo del cual puedes levantarte y aprender, hasta hacer una comunidad de personas que comparten esta experiencia, ya sea solo o con un nuevo equipo lo que sigue es intentarlo hasta que funcione, ¿puedes fracasar de nuevo? por su puesto, pero también puedes aprender de ello y encontrar lo que hace que tropieces.

Para dejar de fracasar, debes tomar acción hasta que el resultado realmente te llene, aporte valor, y sea como lo soñaste o mejor.

Espero que esta nueva manera de ver los fracasos, realmente te sea de mucha ayuda y  sobre todo que lo compartas con quien creas que lo necesite en redes sociales. 

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